Son los recursos naturales de un país, una bendición para su economía? En una aproximación a primera vista, pareciera si. Sin embargo, la abundante literatura económica internacional, las experiencias de muchos países del mundo que basaron o basan su economía en las rentas provenientes de sus recursos naturales, demuestran que debe hacerse un análisis frío de la situación.
Síntomas como inflación, problemas políticos internos de un país por obtener una parte de dichas rentas, la disminución de una oferta exportadora, y otros síntomas económicos que se resumen en la «Enfermedad Holandesa», parecen describir casi al pie de la letra la actual y futura situación Boliviana.
Hay excepciones, claro, para no caer en dicha trampa, pero, ¿Cuál es el camino?