Un análisis de la Fundación Milenio indica que de los Bs 27.482 millones de inversión pública presupuestados para el próximo año, el 82% (23.056 millones) está asignado al Ejecutivo, las instituciones descentralizadas y las empresas públicas; dejando el 18% para los niveles subnacionales.
“El Gobierno insiste en retener para sí obras y programas que deberían desconcentrarse. Esto, a despecho de la pobre ejecución de los recursos de inversión pública en las gestiones anteriores, y a expensas de las necesidades y demandas de los gobiernos subnacionales”, sostiene Fundación Milenio.
“Está demostrado que un presupuesto centralizado es más ineficiente que uno que reparte recursos entre los varios niveles de administración y según las competencias y atribuciones definidas en la Ley Marco de Autonomías y Descentralización. Y no solo eso, también se presta menos al control y la vigilancia de los ciudadanos que en los ámbitos locales y departamentales y, por tanto, es más proclive al despilfarro y la discrecionalidad”, advierte.
Según Milenio, el Presupuesto General del Estado es un instrumento de la política económica que debe dar certidumbre sobre las cuentas públicas, la programación de ingresos y gastos, la inversión pública anual y las metas macroeconómicas.
Sin embargo, “no es eso lo que ofrece el proyecto de presupuesto 2023. La desprolijidad en su elaboración salta a la vista, así como una serie de inconsistencias que dejan más interrogantes que respuestas”, remarcó.
9 de diciembre de 2022
Fuente: El Deber
Descargar “Coy 490 - Un presupuesto desprolijo y atrapado en el clientelismo” Descargado 1765 veces