Sin embargo, Roberto Laserna, de la fundación Milenio y CERES, y miembro del panel de especialistas, opinó que no se trata de persecución, es que finalmente se está revelando el mal uso que se hizo del crecimiento económico que el país experimentó los pasados 14 años, cuando Evo Morales fue presidente.
«La bonanza económica de los últimos años no fue bien utilizada, fue despilfarrada, el país nunca antes había tenido una bonanza como la de esos años pero que la calidad del empleo, la productividad y la proyección era muy débil», aseguró.
Para Laserna, lo que pasó es Bolivia es que Morales no estaba listo para dejar el poder, nunca se preparó para un cambio y tampoco su gabinete.
«La demanda a respetar el voto, la voluntad democrática, los jóvenes y las mujeres de Bolivia fueron quienes impulsaron los movimientos y que finalmente lograron la salida e Morales. Fue una insurrección de carácter ético», agregó.
Para el analista, «el error de Evo fue tratar de mover sus bases para que se enfrentaran civiles contra civiles, no uso a la policía, puso al campo contra la ciudad, hasta que las autoridades militares y policiales le dijeron que se fuera para evitar un enfrentamiento civil».
Pero Fernando Molina opina que eso es lo que exactamente está pasando: «Las acciones del gobierno interino son peligrosas porque se restauran malas prácticas políticas y de de poder, porque vuelve una élite que había estado alejada del poder y que esta deseosa de sustituir a la otra élite indígena».
10 de diciembre de 2010
Fuente: VOA Noticias