Por segundo año consecutivo, el país está entre las naciones con más alto índice de déficit fiscal, siendo el 2017 y el 2018 los años con las cifras más altas en tres décadas.
“El déficit fiscal se dispara”, así lo señala el informe de la Fundación Milenio. Los datos más recientes publicados afirman que el 2018 el déficit del sector público no financiero (la suma del Gobierno y las empresas públicas) fue de Bs 22.670 millones superior a los Bs 20.278 millones de 2017, siendo la cifra más alta en tres décadas.
Sin tomar en cuenta a Venezuela, Bolivia en 2018 fue la economía de la región con el déficit fiscal más elevado por segundo año consecutivo con un 8,1 % del PIB. Los siguientes países con déficit elevados son Brasil con 7,1% del PIB y Argentina con 5,0 % del PIB.
El informe describe que Bolivia, desde 2006 hasta 2013 hubo un periodo de superávits consecutivos. Sin embargo, desde 2014 hasta 2018 el déficit se mantiene arriba de los 3,4%.
El economista José Alberti indicó que la política monetaria y fiscal han sido expansivas, prueba de ellos son las son las tasas de regulación monetaria cercanas a cero, a la par de instrumentos de inyección de liquidez que fueron las redenciones de los títulos de regulación monetaria. Asegura que «análogamente la política fiscal discrecional y arbitraria han abierto un hueco de necesidad de financiamiento para el 2019 de aproximadamente $us 3.500 millones».
Proyectó que en 2019 el déficit fiscal se encontrará en torno al 8,5% del PIB. “El gasto discrecional y el despilfarro del dinero público prácticamente muestran un Estado altamente endeudado interna y externamente”, dijo.
Alberti señaló que, a abril 2019, el saldo de la deuda externa pública fue de $us 10.287 millones y en porcentaje PIB representó el 23,5%.
Otros países se reponen
Ecuador es el que tiene el déficit más bajo con -1,2% del PIB. Con excepción de Bolivia, Colombia y Paraguay, los países mejoraron su situación fiscal en 2018 respecto a 2017 siendo, nuevamente, Ecuador el más destacado, bajando desde un 4,5 % del PIB al 1,2 % del PIB.
Asimismo, el 2005 fue el último que Venezuela registró un superávit fiscal. Desde el 2006 mantuvo déficits que crecieron casi de manera ininterrumpida hasta el año 2014; en este periodo se pasó de un -1,6 % del PIB al -15,4% del PIB. Se estima que en 2017 su déficit superó el 20% PIB y que 2018 cerró con casi un 30%.
En cuanto a los países de Argentina y Brasil, el informe señala que tienen complicaciones en su economía. El punto más álgido de la crisis argentina fue cuando tuvo que recurrir al FMI para estabilizar su economía y dar confianza a los mercados internacionales, evitando que su moneda pierda más valor. Aún se encuentran luchando por salir de sus problemas, para lo cual necesitan ajustar las cuentas fiscales.
Brasil también vivió un periodo de bonanza en el 2010, llegando a crecer 7,5%, sin embargo con el cambio de tendencia en el ciclo económico, comenzó el deterioro en el 2012, decreciendo el 2015 y 2016 a tasas superiores de -3% lo que también incidió en los resultados fiscales.
13 de junio de 2019
Fuente: Economy
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