2008 fue el último año, en verdad solamente los primeros seis meses, del boom en los precios de las materias primas que comenzó entre 2005 y 2006. En estos años el aumento en el precio nominal y real de los productos que exporta Bolivia fue extraordinario. (…) El gas natural se convirtió en el principal rubro de las exportaciones que a su vez generó un flujo de recursos para el Estado, bajo la forma de renta gasífera, que posibilitó revertir, transitoriamente, el tradicional déficit fiscal y lograr superávit, además de transferir recursos a las regiones, municipios y universidades. Por otra parte, el incremento del valor en las exportaciones petroleras determinó que las cuentas externas cierren con saldos favorables hasta 2008.
A partir de octubre del pasado año el estallido de la crisis financiera en Estados Unidos, rápidamente impactó en el sector real y se extendió mundialmente. Quebraron decenas de bancos y empresas, y las que continúan operando tuvieron que reducir la escala de sus actividades, pese a los billonarios recursos que los gobiernos y bancos centrales inyectaron a sus economías. La recesión generalizada, con peligro de convertirse en depresión, el desempleo y la caída en el precio de las materias primas, son las consecuencias de la crisis. A fines de marzo de 2009 el anuncio de las autoridades estadounidenses de la creación de un banco que adquirirá los activos denominados “tóxicos” del sistema financiero, parece significar el inició de un penoso proceso de reordenamiento del sistema financiero y, en consecuencia, de la generación de las condiciones para la recuperación económica. Sin embargo, varios analistas opinan que dicha compra servirá muy poco y que lo peor está por llegar En este contexto la única certidumbre es la recesión global en 2009.
Bolivia que se benefició del auge no tomó previsiones para enfrentar los efectos de una disminución en el precio de los productos que exportamos, a diferencia, por ejemplo, de Chile y Perú, que conformaron fondos de ahorro, recursos que podrían utilizarse para financiar una política fiscal anti cíclica sin poner en peligro la estabilidad.
2008 es un año de modificación de comportamiento económico mundial y de Bolivia. Las variables económicas develan un cambio drástico en sentido contrario a los últimos 4 años. La finalización del boom económico nos trae a la mente la metáfora de las vacas gordas y las vacas flacas. ¿Qué hará Bolivia, ahora que se acabaron las vacas gordas, y que no ha previsto para la época de vacas flacas?
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